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El PIB de Estados Unidos - Mayo del 2012

La economía estadounidense se desaceleró en el primer trimestre, tal como se esperaba, mientras que un gasto del consumidor y un crecimiento de las exportaciones menores a lo estimado inicialmente podrían reducir las expectativas para el trimestre actual.
El Producto Interno Bruto (PIB) de Estados Unidos creció 1.9% en el primer trimestre de 2012, confirmando la cifra adelantada a fines de mayo, según cifras oficiales del Departamento de Comercio divulgadas este jueves.
La cifra confirma los datos divulgados a fines de mayo, que ya habían revisado a la baja el crecimiento de 2.2% a 1.9%, y está en sintonía con el promedio de las previsiones de los analistas.
Esta tasa es menor al crecimiento de 3% visto en el cuarto trimestre del 2011 refleja en parte un menor ritmo de acumulación de inventarios por parte de las empresas y un paso más lento de las inversiones en equipos y software que lo estimado inicialmente.
Sin embargo, cuando se mide al PIB por el lado del ingreso, la economía creció a un ritmo de 3.1%, por encima de 2.6% del cuarto trimestre del año pasado.
El gasto del consumidor, que representa cerca de 70% de la actividad económica estadounidense, creció a un ritmo de 2.5%, menos que la tasa de 2.7% estimada de manera preliminar.
Y ya hay señales de que el gasto del consumidor siguió desacelerándose en el trimestre actual: las ventas minoristas cayeron en abril y mayo.
"El consumo personal cayó y el deflactor subió. Eso no es exactamente lo que uno quiere", dijo Robbert van Batenburg, jefe de análisis global en Louis Capital Markets, en Nueva York.
Los inventarios de las empresas aumentaron en 54,400 millones de dólares en vez de 57,700 millones, sumando sólo 0.10% al crecimiento del PIB, por debajo de los 0.21 puntos calculados en la medición anterior.
Si se excluyen los inventarios, la economía creció a una tasa de 1.8%, por encima del ritmo de 1.7% estimado previamente y de 1.1% del cuarto trimestre del 2011.
Las exportaciones, en tanto, aumentaron 4.2%, muy por debajo del alza de 7.2% publicada en la medición previa.
Si bien el manejo cauto de los inventarios podría haber dado un impulso al crecimiento del PIB durante el actual trimestre, la revisión a la baja del gasto del consumidor pone al descubierto la pérdida de impulso de la economía, reflejada ya en la débil creación de empleos y en la desaceleración de la industria.
Para el segundo trimestre, se espera que la economía haya crecido en torno a 2%, pero esa estimación podría resultar demasiado optimista en vista de la crisis europea y la incertidumbre fiscal en Estados Unidos.
La inversión en equipos y software fue revisada para mostrar un crecimiento de 3.5%, menor a 3.9% reportado inicialmente. Algunos datos indican que el ritmo se habría suavizado también en el trimestre actual.
Las revisiones bajistas al gasto del consumidor, a la inversión en equipos y software, a las exportaciones y a la acumulación de inventarios, fueron compensadas por las correcciones al alza a la inversión en estructuras residenciales y no residenciales.
El crecimiento de las importaciones fue reducido en 3.4% a una tasa de 2.7 por ciento. Aunque eso apoyó el crecimiento del trimestre, también refleja una menor demanda interna.
Por el lado del gasto público, la economía tampoco recibió apoyo, ya que los desembolsos del Gobierno cayeron 4%, levemente más que la baja de 3.9% reportada inicialmente.
El Departamento de Comercio revisó además las ganancias corporativas tras el pago de impuestos para mostrar una baja de 5.7% frente a la caída de 4.1% de la estimación preliminar.
Se trata de la baja más grande desde el cuarto trimestre del 2008. La caída refleja el fin de un bono impositivo especial que permitió a las empresas acelerar la depreciación de los activos.

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