Venezuela por Hugo Chávez

El próximo 7 de octubre Venezuela decidirá si continuar o no en la ruta hacia el "socialismo bolivariano del siglo XXI" por la que Hugo Chávez ha dirigido a esa nación durante casi 14 años.

En este escenario, resulta pertinente revisar algunos de los indicadores resultado de la administración chavista, algunos de los cuales podrían tener un peso importante en la decisión del electorado.

De acuerdo con información de organismos internacionales, el combate a la pobreza y a la desigualdad que ha estado en el centro de la política social de Hugo Chávez  ha tenido resultados exitosos.

Según la CEPAL entre 2002 y 2010 la pobreza disminuyó en Venezuela en 20,8% al pasar de 48,6% a 27,8%. Para poner esta información en contexto, vale la pena señalar que  en el mismo periodo la pobreza en México pasó de 39.4% a 36.3%. Asimismo, durante esos 8 años, la pobreza extrema se redujo en Venezuela de 22,2% a 10,7%, mientras que en México aumentó de 12.6% a 13.3%.

Fuente: Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), sobre la base de tabulaciones especiales de las encuestas de hogares de los respectivos países.

* Äeras urbanas

b Cifras de la Misión para el empalme de las series de empleo, pobreza y desigualdad (MESEP). Estas cifras no incluyen modificaciones en la medición de la pobreza realizadas en 2011 por el Departamento Nacional de Planeación (DNP) de Colombia.

c Cifras del Instituto Nacional de Estadísticas e Información (INEI) del Perú.

Por su parte, el Programa de Naciones Unidas para los Asentamientos Humanos (ONU-Hábitat), que mide la desigualdad según el coeficiente de Gini, señala que Venezuela es el país con menor desigualdad en la distribución de la riqueza de América Latina.

Del informe de 2011 sobre el Índice de Desarrollo Humano (IDH) del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) que mide el promedio de los avances en términos de salud, educación e ingreso,  se desprende que entre los años 2006 y 2011, Venezuela escaló 7 puestos en la tabla de países, ocupando el tercer lugar mundial en cuanto a los países que más lugares han subido en la lista, solamente superada por Hong Kong, que mejoró 14 puestos y por Cuba, país que subió 10 sitios.

Fuente: PNUD Indicadores Internacionales sobre Desarrollo Humano

Sin embargo, existe otro lado de la historia. Según proyecciones del Fondo Monetario Internacional, Venezuela tendrá la mayor inflación de la región latinoamericana en 2012, y la tercera a nivel mundial, después de Belarus y Etiopia. Mientras que la proyección de inflación para Venezuela es del 31.6% para México es de 3.9%. Esta situación afecta gravemente el poder adquisitivo de los venezolanos y, en consecuencia su bienestar.

Jorge Guerra, director de la escuela de economía de la Universidad Central de Venezuela comenta que la inflación tiene que ver con que el Estado venezolano ha crecido desmedidamente: "Muchas empresas venezolanas fueron expropiadas y ahora son del Estado, pero no son eficientes, redujeron sus niveles de producción y el año pasado hubo un déficit fiscal del sector público del 12%". El académico explica: "casi todas las empresas del Estado dan pérdidas, y esas pérdidas hay que financiarlas y se financia aumentando la cantidad de dinero circulante".

Venezuela también ocupa los primeros lugares a nivel mundial en otras listas menos decorosas. El estudio global de homicidios 2011 de la Oficina de las Naciones Unidas contra las Drogas y el  Delito muestra que Venezuela es el quinto país más violento del mundo, con una tasa de 49 asesinatos por cada 100, 000 habitantes en 2010, mientras que en 1998, año anterior a que Chávez asumiera la presidencia, esta tasa era de 19.4 asesinatos por cada 100,000 habitantes. En México en el 2010, en el marco de la "lucha contra el crimen organizado", se registraron 21.5  muertes por cada 100, 000 habitantes.

El Observatorio Venezolano de la Violencia actualiza estos datos señalando que en el país sudamericano en 2011 la cifra pudo haber llegado a 67 asesinatos por cada 100,000 habitantes. Roberto Briceño León, director de este observatorio, afirma que de los 155,000  homicidios ocurridos durante la gestión de Hugo Chávez, 140,000 han quedado impunes.

La situación de violencia se multiplica de forma alarmante en las cárceles venezolanas. Conforme a los datos del Observatorio de Prisiones de ese país, un venezolano tiene 20 veces más probabilidades de ser asesinado en la cárcel que en la calle. Según cifras recabadas por Amnistía Internacional en la actualidad hay más de 40, 000 presos en un sistema diseñado para 12, 500.

Sumado a lo anterior, el pueblo venezolano ha visto restringidos otros derechos fundamentales  en el contexto del modelo personalista de ejercicio del poder de Chávez, que sin apartarse de la "legalidad" ha socavado la división y el balance de poderes característico de una democracia efectiva.

Mientras la mayoría chavista en la Asamblea Nacional aprobó leyes que amplían las facultades del gobierno en perjuicio de la libertad de expresión; el Tribunal Supremo de Justicia fue dejando de cumplir su función de control del Ejecutivo, abdicando en su obligación de proteger los derechos de los ciudadanos, particularmente en casos relacionados con medios de comunicación.

Como muestran informes del Comité Internacional para la Protección de Periodistas y de Human Rights Watch, entre otras organizaciones, mediante decisiones judiciales y procedimientos administrativos, decenas de medios de comunicación han sido cerrados, como es el caso de RCTV, el canal de televisión privado más antiguo de Venezuela, cuya señal fue retirada del aire en 2007.

El terreno perdido por estas voces ha sido recuperado por el oficialismo, que a través de sus facultades regulatorias ha ampliado la cantidad de medios de comunicación estatales y afines al gobierno. Sumado a ello, el gobierno ha usado de manera amplia sus facultades para emitir cadenas nacionales con objeto de transmitir discursos presidenciales y mensajes que destacan políticas del gobierno.

Este escenario, en el que se ha llegado a emprender procesos penales contra los opositores al régimen,  es tierra fértil para la intimidación, la censura y autocensura.

Aunque hay también muchos otros grises, en el marco de estos contrastes es que las y los venezolanos emitirán su voto el próximo 7 de octubre.

La edición más reciente del Latinobarómetro (2011) muestra que el 45% de las y los venezolanos se encuentran "muy satisfecho" o "más bien satisfecho" del funcionamiento de la democracia en su país. En México sólo el 23% presenta este nivel de satisfacción.

El citado informe plantea que en Venezuela el "pueblo acusa positivamente recibo de las acciones de gobierno del presidente Chávez, mientras el mundo lo califica negativamente". Así, "mientras los venezolanos piensan bien de su democracia, el mundo dice que está mal".

A la luz de los resultados, principalmente basado en los casos de Chile y Venezuela, el Latinobarómetro concluye que "poco importa a los ciudadanos que las instituciones funcionen "muy bien" como es el caso de Chile, si al final del día el ciudadano no puede percibir que ellas están trabajando para el bien común, para su bienestar. Si la velocidad y magnitud de los avances no logran entregar suficientes resultados, las instituciones quedan disminuidas".
Fuente: noticierostelevisa