Fiction City ha sintetizado la adrenalina del éxito en una curva de crecimiento exponencial que no cede de los 45 grados ascendentes. Al imaginar este proyecto consideré que la probabilidad del fracaso no era un sencillo cálculo de posibilidades en un dado; era sin duda el asentimiento de la falta de apoyo en nuestro conocimiento y el desarrollo de métodos para superar nuestra ignorancia. Fue fundamental la capacidad de conformar un equipo profesional con más ambiciones por Fiction City que por sí mismos, capaces de vivir en un mercado hostil y gerenciar el caos, para alcanzar el éxito. A diario les comento a mis colaboradores que las librerías están atiborradas de biografías de ejecutivos de éxito que presentan su definición de cómo alcanzarlo, pero nadie cuenta como aprender del fracaso. Internet ha sido una escuela acelerada de negocios, plagada de errores y con pocos aciertos, para adaptar a este mundo a la nueva economía del conocimiento. Aun nosotros nacimos