En los últimos meses han crecido más los préstamos que el ahorro.
Las instituciones financieras han dedicado más esfuerzos en los últimos meses a prestar más dinero y no tanto a captar recursos de los colombianos.
En otras palabras, los bancos han estado más concentrados en otorgar crédito que en recibir ahorro, lo cual ha implicado un giro en el manejo de sus estrategias del negocio de intermediación y de inversiones.
La cartera de crédito de la banca crece a un ritmo del 18 por ciento anual y todo indica que en esa dinámica se mantendrá en el transcurso del año.
Por su parte, los depósitos en cuenta corriente y de ahorro crecen a una tasa del 10 por ciento, en tanto que los Certificados de Depósito a Término (CDT) han mostrado en meses recientes caídas sustanciales.
Los expertos creen que, en caso de mantenerse esa tendencia, los bancos deberán utilizar nuevas estrategias para recomponer sus niveles de liquidez y atender con solvencia la demanda de préstamos que se está dando por parte de las empresas y las personas naturales.
El ex superintendente financiero Augusto Acosta dice que esa situación es sana para la economía, pues seguramente los bancos se están viendo obligados a salir de buena parte de sus inversiones de portafolio para obtener liquidez y destinar esos recursos a su negocio central de otorgar crédito.
“En los últimos años la banca ha cambiado constantemente de estrategia en el manejo de sus activos. A veces se concentra más en las inversiones y otras en el crédito, dependiendo de la situación de la economía”, dice Acosta.
Señala que es positivo que los bancos otorguen más crédito para el crecimiento de la economía, siempre y cuando tengan un buen control de la morosidad de sus clientes.
Los expertos consideran que el sistema financiero está preparado para atender la demanda de crédito debido a su alto nivel de capitalización.
A subir las tasas de depósitos
Con el aumento de tasas de interés que comenzó a aplicar este año el Banco de la República, las entidades financieras ya comenzaron a trasladar ese efecto a las tasas de ahorro. Esto se refleja en la tasa DTF que regirá esta semana de 3,59 por ciento efectivo anual, el nivel más alto registrado desde mayo del 2010.
Las instituciones financieras han dedicado más esfuerzos en los últimos meses a prestar más dinero y no tanto a captar recursos de los colombianos.
En otras palabras, los bancos han estado más concentrados en otorgar crédito que en recibir ahorro, lo cual ha implicado un giro en el manejo de sus estrategias del negocio de intermediación y de inversiones.
La cartera de crédito de la banca crece a un ritmo del 18 por ciento anual y todo indica que en esa dinámica se mantendrá en el transcurso del año.
Por su parte, los depósitos en cuenta corriente y de ahorro crecen a una tasa del 10 por ciento, en tanto que los Certificados de Depósito a Término (CDT) han mostrado en meses recientes caídas sustanciales.
Los expertos creen que, en caso de mantenerse esa tendencia, los bancos deberán utilizar nuevas estrategias para recomponer sus niveles de liquidez y atender con solvencia la demanda de préstamos que se está dando por parte de las empresas y las personas naturales.
El ex superintendente financiero Augusto Acosta dice que esa situación es sana para la economía, pues seguramente los bancos se están viendo obligados a salir de buena parte de sus inversiones de portafolio para obtener liquidez y destinar esos recursos a su negocio central de otorgar crédito.
“En los últimos años la banca ha cambiado constantemente de estrategia en el manejo de sus activos. A veces se concentra más en las inversiones y otras en el crédito, dependiendo de la situación de la economía”, dice Acosta.
Señala que es positivo que los bancos otorguen más crédito para el crecimiento de la economía, siempre y cuando tengan un buen control de la morosidad de sus clientes.
Los expertos consideran que el sistema financiero está preparado para atender la demanda de crédito debido a su alto nivel de capitalización.
A subir las tasas de depósitos
Con el aumento de tasas de interés que comenzó a aplicar este año el Banco de la República, las entidades financieras ya comenzaron a trasladar ese efecto a las tasas de ahorro. Esto se refleja en la tasa DTF que regirá esta semana de 3,59 por ciento efectivo anual, el nivel más alto registrado desde mayo del 2010.
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