El mundo que viene no parece precisamente un cuento de hadas. Surge naturalmente el interrogante sobre qué sucederá con nuestro país ante tales circunstancias. Para tener la capacidad de tolerar la incertidumbre, procesar la complejidad y enfrentar los malos augurios sin caer en la parálisis, resulta necesario tomar prudente distancia de la coyuntura. Así se podrá apreciar con mayor precisión la dinámica de la estructura. "La perspectiva organiza la realidad", sostenía Ortega y Gasset. En noviembre pasado, la canciller alemana, Angela Merkel, publicó en su podcast semanal una sentencia que todavía produce escalofríos: "Costará una década hasta que volvamos a estar en una posición mejor". Apenas nueve días después, en un discurso ante miles de delegados de su partido, subió la apuesta. Dijo que la actual crisis europea es "la hora más dura desde la Segunda Guerra Mundial". Europa se encamina hacia una "década perdida". Al menos ésta parece ...